Escrito por: Fran Carrera
Imagínate castrar tanto a los miembros de tu banda favorita que, con tal de que los dejes de chingar, se vuelven tus compas, te invitan a grabar unas voces en su nuevo álbum y, como no tienen varo para pagarte, te invitan unas hamburguesas. Imagínate que el día de la grabación te topas a Snoop Dogg en el mismo estudio, se fuman unos porros, se echan unas partidas de videojuegos y hasta te tomas una foto con él.
Imagínate que ese castre te lleva tan pero tan pero tan lejos que terminas parado en el escenario principal de Woodstock cantando la línea que grabaste al micrófono junto a ellos. Luego te invitan a grabar la palabra ‘Mota’ en uno de sus nuevos sencillos. Tu castre no tiene límites y ahora eres un miembro no oficial de la banda.
Imagínate que varias décadas después, Dexter Holland, ahora piloto certificado, hace un karaoke en la cabina de un avión privado junto a Noodles y tú vas a bordo cantando tu línea. Esa canción se llama ‘Come Out and Play’ y, como a muchos adolescentes, te cambió la vida. No estamos hablando de otro que el icónico Jason ‘Blackball’ McLean quien, como te contamos en estos breves párrafos, comenzó siendo ese fan castroso de The Offspring que se les acercaba a la mesa de merch después de los shows para preguntarles por qué no habían tocado su rola favorita.
¿Qué sentirá ‘Blackball’ hoy al ver a ‘Smash’ cumplir 30 añotes? ‘You Gotta Keep ‘Em Separated’ es la línea que le pidieron que cantara y que sale de una clase de química que tomó Dexter en prepa con unos matraces y en la que su profesor le pidió que mantuviera algunos químicos separados. Junto a ‘Self Esteem’, ‘Come Out And Play’ es no sólo una de las canciones más populares de The Offspring sino una de las rolas más icónicas del punk.
Pero ‘Smash’ es mucho más que ‘Blackball’, es mucho más que ‘Self Esteem’, mucho más que ‘Come Out and Play’. ‘Smash’ es punk, es pop punk, ska, es California, es skate y era tu walkman al que le tenías que comprar pilas a cada rato. ‘Smash’ tiene sus raíces en los ochenta pero representa la niñez y juventud de los noventa. Uno de los álbumes de punk más memorables de una década que todo el mundo recuerda por los ‘Neverminds’, los ‘Ok Computers’. ‘Smash’ te hace recordar que los noventa fueron la verga. Escucharlo 30 años después se siente tan bien como la primera vez.
